Cómo entrenar a un perro guía para personas con discapacidad intelectual
Introducción
Los perros guía son animales muy útiles para personas con discapacidad visual, pero también pueden ser entrenados para ayudar a personas con discapacidad intelectual. Si estás pensando en entrenar a un perro guía para alguien con discapacidad intelectual, aquí te damos algunos consejos para ayudarte en el proceso.
Elige el perro adecuado
No todos los perros tienen lo que se necesita para ser un perro guía, y menos para una persona con discapacidad intelectual. Elige un perro que tenga una personalidad calmada y amigable. Necesitas un perro que sea fácil de entrenar, y que esté dispuesto a trabajar para su dueño.
Evaluación del perro
Antes de empezar a entrenar a un perro para ser un perro guía, es importante hacer una evaluación completa del perro. Un médico veterinario debe hacer un examen médico completo para asegurarse de que el perro no tenga ningún problema de salud. Además, se debe evaluar su temperamento y comportamiento para determinar si tiene las cualidades necesarias para ser entrenado como perro guía.
Entrena al perro para que sea un buen compañero
Tu perro guía debe ser capaz de acompañar a la persona con discapacidad intelectual sin sentirse distraído o ansioso por la tarea. Un perro bien entrenado debe ser obediente, seguro y tranquilo. Para lograr esto, deberás entrenar al perro para que responda a tus órdenes.
Entrenamiento básico
Antes de que el perro pueda llegar a ser un perro guía completamente entrenado, debe recibir entrenamiento básico en obediencia. Esto incluye conocimientos básicos de obediencia como caminar a lado de la persona con correa, sentarse cuando se le indica y responder a órdenes básicas de voz y gestos.
Entrenamiento avanzado
Una vez que el perro ha aprendido las habilidades básicas de obediencia, es el momento de comenzar con el entrenamiento avanzado. Entrena al perro para que sea capaz de detectar obstáculos o peligros, también para que pueda responder a comandos más específicos como 'encuentra la salida' o 'deja el objeto que tienes'.
Pruebas de entrenamiento
Los perros guía para personas con discapacidad intelectual tienen una variedad de pruebas que deben pasar. A lo largo del proceso de entrenamiento, es importante realizar pruebas regulares para medir el progreso del perro y asegurarse de que esté adquiriendo las habilidades necesarias.
Entrena al dueño
Entrenar al perro no es suficiente para que la persona con discapacidad intelectual pueda beneficiarse plenamente de él. Es importante asegurarse de que el dueño también esté capacitado para trabajar con el perro.
Entrenamiento del dueño
El dueño de un perro guía debe recibir un entrenamiento completo en el manejo del perro, especialmente en la comunicación con el animal. El dueño debe ser capaz de entender el lenguaje corporal del perro y saber cómo responder adecuadamente para mantener al perro motivado y preparado para la tarea.
Mantén la motivación
El entrenamiento del perro y el dueño no es un proceso fácil y constante. Es importante mantener la motivación durante todo el proceso para hacer que el entrenamiento sea efectivo.
Recompensas
El uso de recompensas es una forma efectiva de mantener la motivación durante el entrenamiento. Es importante asegurarse de que los perros tengan un premio por su buen trabajo. Las recompensas pueden ser en forma de juguetes, golosinas o caricias.
Establecer objetivos
Otra forma de mantener la motivación es estableciendo objetivos claros y alcanzables. Al establecer metas alcanzables a corto y largo plazo, puedes asegurarte de que el entrenamiento sea efectivo y que el progreso se note.
Conclusion
En resumen, entrenar un perro guía para personas con discapacidad intelectual requiere de una cuidadosa selección del perro, entrenamiento básico y avanzado, pruebas regulares, entrenamiento del dueño y mantener la motivación. Un perro guía bien entrenado es un gran recurso para las personas con discapacidad intelectual, ya que les ayuda a aumentar su independencia y autonomía en la vida cotidiana.